¡VIAJA!

Invierte en viajar porque eso es invertir en VIVIR. 

Usa lo que ganes con todo tu esfuerzo para alejarte de vez en cuando, porque no puede haber perspectiva sin distancia.

Vete, vuelve, y vuelve a irte.

Viaja con tu gente más querida, viaja solo. Viaja estando soltero, sin ataduras. Sólo después viaja en pareja. “Nada pone a prueba el amor como viajar juntos”, decía Mark Twain.

Camina, camina, camina.

Gasta los pies y tus zapatos descubriendo caminos nuevos, senderos desconocidos, paisajes que te asombren.

Habla con desconocidos, escucha atentamente todas sus historias, comparte las tuyas. Haz todas las preguntas que tu corazón y tu mente quieran saber.

Come solo. Come sin prisa. Come con gente distinta. Come caminando. Come andando.

La comida es gasolina y sin ella no vivimos. Disfruta de tu comida mientras viajas. Come “allí” lo que nunca comerás “aquí”.  Lo caro y lo barato. Lo verde y lo amarillo. Lo dulce y lo salado. Lo que te gusta y no te gusta.

PRUEBA.

Exprime cada día y cada noche.  Diviértete y pierde la noción al menos una noche en cada ciudad, y prueba todo lo que no te mate. Haz el ridículo, date el gusto.

Enamórate por un par de días. Ama en otro idioma. Habla en otras lenguas, lo que puedas. Toca la gloria de verte a ti mismo diferente.

Viaja con HUMILDAD.

Esto es lo que garantiza la capacidad de asombro.  Sorpréndete de lo viejo y de lo nuevo, de lo oscuro y de lo claro, de lo extraordinario y de lo mundano.

Asómbrate de los colores, de los olores, de la naturaleza y de lo que la gente hace con ella. Asómbrate del caos, del arte, de la riqueza y de la pobreza, del futuro y del pasado, de lo exquisito y de lo repugnante.

Aprende sin soberbia, y déjate arrollar una y otra vez por el asombro, porque esto hidrata y nutre el alma y el cerebro.

Twain decía: “VIAJAR ES FATAL PARA LOS PREJUICIOS, LA INTOLERANCIA Y LA ESTRECHEZ DE MENTE. NADIE ADQUIERE UNA VISIÓN AMPLIA, GENEROSA Y SALUDABLE SI SE QUEDA EN UNA ESQUINA DE SU TIERRA TODA LA VIDA”.

Cuando te sientas pleno, cuando te sientas triste.

Cuando te encuentres solo, cuando te cases.

Cuando te separes y te divorcies.

Cuando tengas hijos, cuando no los tengas.

Cuando no sepas hacia dónde va tu vida, o cuando ya lo hayas descubierto. ¡VIAJA!

 

-Poli Impelli-

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